Historia de la propaganda (2/3)
En este apartado seguimos hablando acerca de lo que es la propaganda política en sí, hablamos sobre los puestos a ocupar por los que deberían ser los propagandísticos, tratamos puntos interesantes sobre la misma y, comprendemos otros interesantes puntos.
En estas líneas (y las de la próxima publicación) se toma el tema de los precursores de la propaganda, de cómo fueron implementando medidas para utilizarla como método de persuasión, para así poder ganar adeptos y seguidores para una causa política, religiosa o cívica. A la misma vez, que se discursa acerca del nacimiento y la aplicación de esta ciencia en antiguas sociedades.
Propaganda política en Grecia y Roma
En las sociedades de la antigua Grecia y de la Roma Imperial, encontramos numerosos escritos y testimonios en los que se manifiestan claramente el uso de técnicas muy desarrolladas comparables con lo que es hoy la propaganda política.
Tanto Platón como Aristóteles abordaron el tema de la propaganda, ellos utilizaron el término de suasión como equivalente a propaganda. El primero que vimos fue la disuasión, utilizado por Sun Tzu.
Aristóteles escribe un libro titulado "El Arte de la Retórica", todo un tratado de cómo persuadir. Posiblemente este sea el primer tratado escrito sobre comunicación política.
En "La República", así como en los "Diálogos Socráticos", ambas obras escritas por Platón, encontramos también numerosas referencias sobre el quehacer propagandístico.
Para esa época, los griegos planteaban que era imposible dedicarse a los asuntos de la política desconociendo el arte de la retórica o de la persuasión, el que evolucionó hasta convertirse en parte importante de lo que es hoy la propaganda política.
Coliseo Romano, sitio de entretenimiento y esparcimiento |
Como técnica propagandística, Roma utilizó los multitudinarios desfiles, los circos, los grandes monumentos, los panfletos y el grafiti, entre otros.
La Iglesia Católica, cuna de la propaganda moderna
Existe consenso entre los especialistas en la materia, de que los orígenes de la propaganda, concebida como un conjunto de técnicas diseñadas y aplicadas para adoctrinar y obtener adherentes o seguidores, se encuentran en el seno de la Iglesia Católica.
Alegoría de los discursos eclesiásticos |
El Papa Clemente VII crea en 1599 la Congregación Super Negotiis Sanctae Fidei en Religionis Catholicae o de Propaganda Fide, esta congregación de cardenales, debía estudiar y opinar sobre la mejor manera de contrarrestar el aumento de los protestantes, así como buscar mecanismos que permitieran a la iglesia católica llegar a los herejes y a los no convertidos en las nuevas tierras descubiertas por los españoles y portugueses.
El Papa Clemente, a quien se le reconocen numerosos logros en su gestión, murió el 5 de marzo de 1605, sin concretar la creación de Propaganda Fide. Fue sustituido por León XI, quien murió un mes después de su coronación.
Monje preparando textos |
El trono de San Pedro, es ocupado entonces por Paulo V quien al parecer no promovió la creación del proyecto Propaganda Fide. Este Papa muere el 18 de enero de 1621, luego de impulsar un amplio proceso de renovación del catolicismo y fue sustituido por Gregorio XV cuyo reinado como Papa fue solo de dos años. Sin embargo, de acuerdo con Ricardo García Villoslada y Bernardino Llorca, profesores de historia eclesiástica de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma y quienes publicaron la Historia de la Iglesia Católica en cuatro tomos, fue justamente Gregorio XV quien establece definitivamente la “Congregación de Propaganda del empleador Fernando II y de los católicos, en la entablada lucha contra los protestantes”.
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